Cronológicamente hablando es considerado como el primer algebrista de Europa y como introductor del sistema numérico árabe. Fue educado en Argelia donde trabajaba su padre y aprendió el uso del ábaco. Posteriormente recopiló todo lo aprendido en Egipto, Siria, Silicia y Provenza en su obra Liber Abaci (Libro del ábaco), él cual sirvió para la compilación de manuales de aritmética para uso de los comerciantes por todos sus ejemplos.
Fue uno de los primeros hombres en llevar la matemática árabe a Europa además de poner muy alto el nombre de la matemática griega y darla a conocer entre comerciantes y mercaderes, consiguiendo así sacarla de los monasterios y el monopolio de los eruditos.
Leonardo Fibonacci fue sin comparación alguna el matemático más original y hábil de toda la época medieval cristiana, pero gran parte de sus trabajos tenían una gran complicación, ya que debido a su dificultad no podían ser bien comprendidos por sus contemporáneos.
Unas de las aportaciones de Fibonacci fue la sucesión de números conocidos como Números Fibonachi, fueron un intento de describir el crecimiento de una población teniendo en cuenta que cada individuo tendría dos hijos a lo largo de su vida. Esta sucesión tenía una fórmula sencilla.
Sandra Egea Marín
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